En esta ocasión hablemos un poco de las élites.
En esta ocasión hablemos un poco de las élites. Y propongo este tema porque tengo la bizarra teoría de que, cuando hablas mucho de una cosa, deja de tener sentido y, al menos dentro del vocabulario y el mundo interior personal, dicha "cosa" desparece.
El elitismo no es una cualidad única de las denominadas "clases altas" o cículos de poder. Las élites se manifiestan en toda relación interpesonal, en todos esos núcleos que llamamos comunidades.
Dentro de los círculos de poder (económico, político, cultural, etc.), es fácil localizar un ambiente elitista. El grupo de "los iniciados" se colocan en la cúspide de la pirámide social y, desde ahí, pretenden mover los hilos de toda actividad relacionada con su grupo. Esto, justificado por una aparente facultad para tomar desiciones mucho más elevada que del resto del rebaño.
Por supuesto, esta observación no tiene nada de original. Lo importante es notar que este tipo de actitud se extiende hasta los grupos que, supuestamente, luchan en contra dicho elitismo.
Los pequeños grupos "contraculturales" terminan bajo una organización bien similar (si no es que hasta idéntica) a aquella de la que tanto se quejan.
Un grupo de "iniciados" se colocan "bajo tierra" y pretenden mover los hilos de las actividades relacionadas con su grupo.
Extraordinario ¿no? Por supuesto, este "juicio" considera algunas excepciones. Desafortunadamente, dichas excepciones tienen pocas posibilidades de sobrevivir, ya que no están inscritas en ninguno de estos dos polos "controladores" y, por tanto, nada tienen a su favor.
En fin, élites por aquí, por allá y por acullá... si de plano no se cuenta con el ímpetu de mandar ambos polos a la mierda, entonces sólo queda ponerse un trajecito chulo y elegante para convertise en un burócrata más, o bien, buscar en las profundidades a los dioses outsiders, lamerles los huevos un ratito y mostrarles que eres "cero fresa" para que te incluyan animosamente en el roooooooock!!!!!!
He aquí otra aplicación más de la Ley de Herodes: o te chingas, o te jodes.
Mientras tanto, yo repetiré "elite" hasta que esa mierda salga YA de mi sano y bellísimo pensamiento (aha jejeje).
eliteeliteeliteeliteeliteeliteelite
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elite
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